¡Muy buenas emprendedores! En el episodio de hoy vamos a hablar sobre cuándo puedes empezar a plantearte dejar tu empleo para dedicarte 100% a crear tu negocio. Porque no nos engañemos, si queremos que nuestro negocio realmente despegue y podamos llegar a vivir de él, nos tenemos que dedicar a ello full-time. Si quieres emprender, también te recomiendo que les eches un vistazo a los cursos de negocios online y de finanzas.
Apúntate a La Emprescuela y accede ahora a todos los cursos
Venga, que lo estás deseando. Da el salto y empieza a crear tu negocio digital.
Tenemos que tener ingresos recurrentes mientras emprendemos
Antes de ver cuándo dejar un empleo, quiero dejar claro que para poder emprender un negocio por nuestra cuenta, tenemos que contar con ingresos recurrentes que nos respalden. No podemos hacer las cosas a lo loco, básicamente porque tendrás que pagar un alquiler y tendrás que comer, además de hacer frente a alguna que otra inversión para ejecutar tu idea.
Mucha gente piensa que montar un negocio es un cambio radical. Y no conozco a nadie que haya creado su negocio haciendo un cambio así. Lo normal es que sea algo gradual. Se te ocurre una idea, ya sea porque tienes un hobbie o porque quieres una salida a un trabajo que no te gusta demasiado, y empiezas a darle vueltas a cómo podrías hacerla realidad.
Poco a poco, irás investigando, pensando en posibles productos, precios, viendo la competencia e ideando cómo sería vivir de ello, y te vas haciendo a la idea de que quizás es posible no depender de un empleo para vivir.
Ojo, no hablamos de hacernos ricos ni de ir a la compra en un Ferrari (eso lo dejamos para los anuncios de YouTube). Hablamos de sacar un sueldo del que vivir bien, sin depender de una empresa.
Y después de darle vueltas, de haberte imaginado cómo sería, de inventarte algún producto o servicio y echar algunas cuentas, empiezas a ver que es posible económicamente vivir con el modelo de negocio que te has imaginado. Y es aquí cuando empiezas. No antes. Obviamente, aún tienes tu empleo, pero ahora además tienes una idea de negocio.
Antes de dejar el trabajo, tenemos que haber validado nuestra idea de negocio
Algo muy importante que quiero que entiendas después de escuchar este episodio, es que una idea es simplemente eso, una idea. Hay gente que piensa que una idea vale dinero. No. Una idea no vale nada. Cualquiera puede tener ideas. Lo que vale dinero es la ejecución de un modelo de negocio.
Por eso, no te conformes con una idea para dejar un trabajo. Porque casi con total seguridad te puedo decir que la primera idea que tengas, va a fracasar. O al menos tendría que sufrir varios cambios para que llegase a funcionar.
Nunca dejes un empleo que te da de comer por una idea. Deja un empleo por algo tangible. Y por eso, aquí va la segunda parte del episodio: tienes que validar tu idea de negocio. Si no validas tu idea, la idea sólo vive en tu cabeza. Cuando la validas (es decir, otras personas pagan algo de dinero real por tu producto), es cuando puedes empezar a tener certeza de que sí puede funcionar.
Y aún habiendo validado tu idea de negocio, podríamos seguir con nuestro empleo. Básicamente, porque aunque validemos una idea, aún no tenemos un modelo de negocio que nos traiga ingresos recurrentes de los cuales podamos vivir.
Por eso, en esta fase, tendremos que compatibilizar nuestro empleo con nuestro proyecto. Y digo proyecto porque, aunque estemos empezando a monetizar un poquito, no estamos viviendo de él. Esa monetización simplemente es la prueba de que se está validando la idea de negocio.
Por cierto, para empezar a monetizar y validar la idea de negocio, tienes que montar un negocio como tal. Es decir, legalmente, o te haces autónomo o haces una SL. Esto es importante si quieres validar de verdad, ya que sí, podrás validar “de estrangis” con conocidos y familiares, pero si quieres ver si eres capaz de vender tu producto a desconocidos en el mundo real, tendrás que facturar. Y para facturar, para ver si eso se sostendría en el mundo real, tienes que tener una empresa.
Por lo que durante algún tiempo, tendrás que compatibilizar tu empleo con tu negocio. De esto hablaremos en otro episodio más adelante.
Llega el momento: dejamos el trabajo
Cuando llevamos cierto tiempo transaccionando en el mercado con clientes reales, y empezamos a obtener ingresos recurrentes, puede llegar el momento en el cual podamos económicamente dedicarnos full-time a nuestro proyecto.
Y fijaos, que para llegar a este punto, al punto de poder dejar un empleo para sólo vivir de nuestro negocio, ya tenemos que tener montado el negocio. No es necesaria una gran facturación, ni siquiera que los ingresos nos den el mismo salario que en el empleo que teníamos (durante un tiempo podemos vivir con menos dinero), pero sí es necesario que haya cierta base económica detrás.
Cuando hagamos el cambio, y dejemos el trabajo, no nos quedaremos sin nada. Nuestros ingresos bajarán, sí, pero sólo durante un tiempo. Lo normal es que, si lo hacemos bien, vayamos facturando más poco a poco, de forma que llegue un punto en el que ganemos lo mismo (o más) que ganábamos con nuestro empleo.
Como veis, montar un negocio conlleva riesgo y algo de inversión, por pequeña que sea (ya el mero hecho de hacernos autónomos y crear la web costará algo de dinero).
Por ello, siempre es necesario tener ahorros. Tener un negocio, sobre todo al principio, cuesta dinero. No vale montar un negocio con la filosofía del “todo gratis”. Tendrás que tener una gestoría. Tendrás que pagar impuestos. Tendrás que hacerte una web. Y esto te costará algo de dinero, es lo que hay.
Lo mejor que puedes hacer es, empezar por ahorrar. Por poner una cifra, para una persona (o una pareja) que quiera emprender un negocio con poca inversión (por ejemplo, uno de infoproductos o de servicios), estaría bien tener al menos 10.000€ ahorrados. De forma que, cuando lancemos nuestro negocio y dejemos el trabajo, incluso si ganamos menos que en nuestro anterior empleo, podamos vivir varios meses con nuestros ahorros.
Recuerda que un negocio sólo muere cuando se queda sin dinero. El dinero es muy importante, así que ahorra. Ahorra dinero, y podrás tardar más en llegar a tu objetivo, e incluso podrás permitirte equivocarte.
Espero que te haya gustado este capítulo del podcast, y si es así, no olvides darle me gusta, suscribirte al podcast, compartirlo, y por supuesto, pasarte por La Emprescuela en laemprescuela.com. ¡Nos vemos en el siguiente capítulo!
Apúntate a La Emprescuela y accede ahora a todos los cursos
Venga, que lo estás deseando. Da el salto y empieza a crear tu negocio digital.
Deja una respuesta